lunes, 9 de enero de 2012

FORT KOCHI


Hemos llegado a Kerala, region litoral costera del cono suroeste de la India, y ultimo estado que vistaremos en nuestro amplio periplo de casi 3 meses por la India.
El brillo del marfil de sus elefantes y sobretodo el aroma y la calidad de las especias que se siguen cultivando continuan atrayendo a comerciantes de todo el mundo desde la antigüedad. Su costa era ya un conocido enclave para fenicios, romanos, arabes y chinos en la ruta de las especias. Con la llegada de los portugueses a finales del siglo XV comenzo la colonizacion europea, portugueses, holandeses e ingleses se disputaron este territorio luchando entre si por el control de lucrativo negocio de las especias.
For Kochi formada por un entramado conjunto de islas y una zona peninsular seria la joya de la corona, ella misma es un crisol de su pasado colonial, eclectica                                          mezcla de la cultura portuguesa, holandesa y britanica que dejaran las huellas de su paso y estancia en esta amurallada ciudad de la costa tropical de Malabar.
Ejemplos evidentes de ese pasado y herencia colonial son sus enormes redes de pesca introducidas por los mercaderes chinos y que hasta hoy se siguen utilizando, se necesitan al menos cuatro hombres para manipular los grandes contrapesos de piedra de estos aparejos, parecidos a enormes telas de arañas, que se usan principalmente cuando hay pleamar, aunque por desgracia con las nuevas y modernas tecnicas de pescas, cada vez es menos rentable utilizar estas redes. Sinagogas del siglo XVI, barrio judio, mezquitas milenareas, iglesias, palacios construidos por los portugueses y ofrecidos como regalos a los Rajas de la epoca como gesto para beneficiarse de previlegios comerciales y mansiones portuguesas levantadas hace cinco siglos reconvertidas en hoteles, completan y sazonan un ameno recorrido por las calles de Fort Kochi impregnadas sin duda de la esencia del pasado.
Pero si hay un matiz que caracteriza a Fort Kochi y la diferencia del resto de Kerala son sus representaciones teatrales de Kathakali, un arte que data aproximadamente del siglo XVI y cuyos espectaculos son obras de teatro-danza generalmente basadas en textos epicos hindues del Ramayana y Mahabharatha que tratan temas universales como el valor, la guerra, la paz, la pobreza etc. La preparacion del Kathakali es lenta y disciplinada, sin duda el vistoso y exuberante maquillaje de los artistas es un plus, sus caras colmadas de colorido resultan retoricamente vistozas, los tocados profusamente adornados transforman a los actores tanto fisica como psicologicamente en los dioses, heroes y demonios a los que encarnan. Los actores acompañados por la voz de los cantantes y el son de los tambores, interpretan estas historias mediante movimientos y gestos muy precisos que se realizan sobre todo con las manos y el rostro.










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